Para los más aventureros
Ya sabemos que estamos en Noviembre y que hace un poquito más de frío que hace un par de meses… Pero precisamente eso es lo que hace de esta experiencia que sea más aventurera de lo que ya es de por sí.
Corsa Nautica es una empresa situada en el Puerto Olímpico de Barcelona (a la altura de Shoko) que ofrece actividades acuáticas de todo tipo y grado de diversión. Nosotros hemos ido a probar el Parasailing y el novedoso e impactante Flyboard.
Para realizar la actividad de Parasailing, y aquí es donde está lo bonito de realizarlo en Octubre, no será necesario que os quedéis en bañador. Al ser una actividad en la que no tocaréis el agua, podéis subir al paracaídas con la ropa con la que habéis venido (abrigaditos). Una barca con una tripulación muy maja os llevará mar adentro donde allí despegaréis desde la parta trasera de la barca estando sentados. El paracaídas se llenará de aire y empezaréis a alejaros progresivamente de la barca (unidos por una cuerda, no cunda el pánico). A una distancia de 150 metros del mar, os podéis imaginar lo relajante y emocionante a la vez que es la experiencia de tener Barcelona a vuestros pies. El vuelo dura 15 minutos (de sobra) y podréis estar hasta 6 personas en el paracaídas dependiendo de las condiciones meteoreológicas. No obstante, si tenéis la suerte de estar enamorados os recomendamos ir con vuestro LoveBird y, por un momento, dejar de mantener los pies en la tierra.
Tras haber realizado el vuelo en Parasailing, regresamos a las oficinas de Corsa Nautica donde, esta vez sí, tocó ponerse el bañador y el neopreno. Cambiamos de embarcación para montarnos en una dirigida con una moto acuática, la responsable de «inyectar» agua a presión para volar en el flyboard. Una vez salimos del puerto y estábamos en pleno mar, el monitor responsable de la actividad empezó a darnos las instrucciones necesarias para volar. El flyboard, para aquellos que no lo sepan, es una especie de base sobre la que se alzan dos botas de tamaño universal donde nuestros piesecillos se encajan. Debajo de esta «tabla» (no confundir con hoverboard) se desprende un gran tubo de plástico que es el que te mantiene unido a la moto acuática y el que, a su vez, te da presión para volar, controlada por el monitor que estará sobre la moto de agua.
Lo dicho, una vez nos pusimos las botas, nos lanzamos al agua para nadar un poquito y encontrar estabilidad. El truco está en mantener las piernas estiradas constantemente y los pies estabilizados en posición horizontal. Es entonces cuando el monitor te dará presión y de repente estarás a unos metros del agua. Tened paciencia, es cuestión de práctica… una vez le hayas pillado el tranquillo te llegarás a elevar hasta 4 metros (los que saben caer al agua alcanzan 12 metros) y podrás virar tu posición según la combinación de flexión de rodillas e inclinación de pies. Pero eso, mejor para la próxima o para un vuelo de larga duración. El que hemos probado dura 15 minutos y está bien para familiarizarte con el flyboard, practicar y volar un poquito. Si queréis repetir, ofrecen vuelos de hasta 1 hora que podréis compartir con hasta 4 personas (mínimo 15 minutos por persona).
Os animamos enormemente a probar esta experiencia diferente y de la que saldréis relajados y, sí, ¡¡En invierno!!
Datos de interés
Qué: Flyboard y Parasailing
Dónde: Corsa Náutica. Port Olímpic, Moll de Marina, 9, Barcelona
Cuándo: Todo el año
Precios:
Parasailing (vuelo 20 minutos): 1 persona 90€ | 2 pax 160€ | 3 pax 210€ | 4 pax 240€
Flyboard: 15 minutos (1 persona) 85€ | 30 minutos (1-2 pax)160€ | 60 minutos (1-4 pax) 300€
Web: corsanautica.com