¿Te gustaría desconectar de todo y sumergirte en algunos de los paisajes más bonitos de Cataluña? La Costa Dorada es la línea litoral que se extiende por la provincia de Tarragona a lo largo de poco más de 80 km, dibujando a su paso un paisaje de acantilados escarpados y calas paradisíacas salpicados de historia y belleza. La Costa Dorada es el lugar perfecto para una escapada en coche.
Cala Fonda o Waikiki
Confiar en el servicio de alquiler de coche es la mejor manera para lanzarse a esta ruta con encanto por el sur de Cataluña. Iniciando el itinerario desde Barcelona y poniendo rumbo sur, la primera parada obligatoria sería Cala Fonda, popularmente conocida como la playa de Waikiki. Para acceder a este rincón paradisíaco de la Costa Dorada, lo más recomendable es dejar el coche en la localidad de La Mora y realizar a pie los poco más de 2 km que la separan de Waikiki. El recorrido es cautivador; y el baño al final del trayecto, un auténtico lujo.
Anfiteatro de Tarragona
A pocos kilómetros de Cala Fonda se emplaza Tarragona, capital de la provincia. La ciudad atesora numerosos encantos pero, si hubiera que elegir su símbolo más representativo, ese sería el anfiteatro. La construcción original, erigida en el siglo II de nuestra era, tenía capacidad para 14 000 espectadores sedientos de espectáculo en las batallas entre gladiadores romanos. Se puede visitar por libre o como parte de las rutas guiadas por la ciudad que organiza, entre otros, el Patronato Municipal de Turismo.
Cambrils
Este pueblo de origen marinero es en la actualidad uno de los enclaves más turísticos de la Costa Dorada. Las estrechas calles de la antigua villa se abren paso hasta el barrio del Puerto, donde las barcas de faenar comparten espacio con los yates de recreo. El Parc Samá pone una nota de contraste con el ambiente marítimo que se respira en la localidad. Este jardín botánico de aires románticos se construyó a finales del siglo XIX y refleja la añoranza de los indianos que retornaban de las Américas. Un lugar inspirador en el que podrás dar un agradable paseo.
Delta del Ebro
El gran delta que forma la desembocadura del Ebro constituye el hogar de infinidad de especies animales, y es uno de los parajes más recomendados del Levante para la contemplación de aves. Como punto final de este breve recorrido por la Costa Dorada, se presenta como una buena oportunidad para acabar la aventura con buen sabor de boca. La Ràpita, el pueblo situado más al sur del delta, está considerado como uno de los mejores lugares de Cataluña para comer un buen arroz al estilo tradicional. ¡Anímate a averiguarlo por ti mismo/a!
Hazte con tu coche de alquiler y lánzate a la carretera. Estas son solo 4 ideas para descubrir lo esencial de la Costa Dorada pero, con la libertad que brinda el alquiler de un coche, seguro que encuentras otras muchas paradas interesantes por el camino.