¿La gente realmente hace dinero jugando en los casinos online?
Después de algunas sesiones de máquinas tragaperras gratis o por dinero real, o partidas de poker o cualquier otro juego de apuestas e, independientemente de la suerte a la hora de alcanzar o no una victoria jugosa, muchos aficionados del juego se podrán hacer la pregunta: ¿Será este un llamado? ¿Debería dedicar mi vida a la apuesta y empezar una carrera de jugador profesional? Después de todo, la vida misma a veces se siente que es también cuestión de suerte, solo que ahora se intentaría convertir esa misma fortuna intrínseca de la vida moderna en una fuente de ingresos.
Los juegos de los casinos online y tradicionales siempre implican un riesgo para el jugador, pero también para el establecimiento. Ambos actores le dejan a la suerte la pérdida o victoria de algo de valor, generalmente dinero. Aunque esto suena justo, hay que recordar que la casa siempre gana, pues todos los juegos de casinos favorecen estadísticamente a la plataforma o entidad que los hospeda. Aun así, esta realidad hace poco para disuadir a los más tercos y aventureros, que probablemente tengan cierta experiencia en el juego y conozcan de primera mano las pequeñas (pero existentes) probabilidades de ganar.
Algunos consejos para mejorar las probabilidades de ganar:
Las dudas no ayudan a nadie
Todos los juegos de casinos tienen una probabilidad real de ganar, por más distante que esta parezca. Si no fuera así, los juegos tendrían que ser retirados porque no se encontraría un público dispuesto a jugarlos. Además, los premios escalan con la probabilidad de ganar, lo que significa que probabilidades más arduas para el jugador se traducen a victorias y premios más grandes. Por ejemplo, los premios en la ruleta son de 36 a 1 considerando las probabilidades que tiene un jugador de ganar una apuesta simple.
Finalmente, es todo cuestión de suerte y hay poca diferencia entre apostar por un número u otro. El dicho dice que “todos los tontos tienen fortuna”, solo podemos jugar y cruzar los dedos para que hoy nos toque ser uno de esos afortunados tontos.
Jugar haciendo la mayor cantidad de apuestas posibles
Los mejores jugadores de casinos saben que no es una carrera de velocidad, sino resistencia. Por ejemplo, teniendo 100 euros, es más probable convertir ese dinero en victorias si se hacen 10 apuestas de 10 euros que si se hacen 3 apuestas de 33. Cuando se juega, se tiene que asumir que siempre se perderán más partidas que las que se ganarán. En juegos como las tragaperras se puede hacer una buena cantidad de dinero si no caemos en la ambición y jugamos conservadoramente.
Ahora, en otros juegos como el blackjack y el poker conviene doblar nuestras apuestas de vez en cuando (si no, solo ganaríamos de vuelta aquello que apostamos). Pero también hay que ser muy cuidadosos para que no se nos vaya de las manos. Después de todo, aquí nadie está contando cartas como el equipo de blackjack del MIT para poner las estadísticas a nuestro favor.
Ganar a lo grande es perder a lo grande
Este punto está estrechamente asociado al anterior. Todos imaginan sus victorias en el juego como ganancias y premios alucinantes que, con un pequeño soplo de suerte, pueden cambiar las vidas del jugador. Pero el problema es que, en este nivel, las derrotas son significativas y pueden llevar al jugador a la bancarrota rápidamente. Claro, esto no significa que a medida que avance el tiempo y suben las ganancias no se puedan reajustar las apuestas “mínimas” que se realizan para siempre estar seguros de que el tiempo que se utiliza jugando valga la pena.
Considerar los casinos online
Aunque la experiencia de pasar una noche en Barcelona de casinos tradicionales y hacer una cantidad importante de dinero, suena muy atractiva y emocionante para muchos, hay que considerar las opciones que nos ofrecen los casinos en línea si lo que queremos es hacer dinero. Además de las ventajas obvias como jugar cuando y donde queramos, los casinos online le permiten al usuario escoger con toda libertad el juego que más les favorezca y además la existencia de promociones y bonificaciones que permitirán jugar más por menos dinero, o incluso gratis, pero siempre con las mismas probabilidades de victoria y los mismos premios
Y lo más importante… divertirse
Lastimosamente, no existe ningún consejo definitivo cuando se trata de convertir la afición al juego en una carrera lucrativa, pues al final todo se resumirá a que tengamos más o menos suerte a la hora de lanzar los dados, literal y figurativamente. Aunque en general podemos recomendar intentar ser pacientes y conservadores, esto no es garantía de que podremos convertir nuestras apuestas en premios seguros. Solo podemos decir que siempre que se juegue sana y responsablemente para divertirse se estará ganando, no importa si se trata de poker o las máquinas tragaperras o si se gana a lo grande o se pierden las apuestas.