El restaurante más macarra del Raval
Tapas y platillos. ¿Qué decir que no sepamos? Pues mucho! Hay un montón de restaurantes de este tipo que no hacen el comfort food que comemos siempre, pero son sólo unos pocos los que arriesgan con proyectos muy personales y originales; y es allí donde deberíamos ir todos. Es el caso de My Fucking Restaurant, un restaurante que se ha instalado en el Raval para conquistarnos las barrigas y las mentes.
Detrás de My Fucking Restaurant, este nombre tan macarra, se encuentran Matteo y Nico, dos italianos que llevan ya más de diez años por la ciudad condal. Se propusieron abrir un restaurante único donde hacer justicia a la historia del Raval haciendo deliciosas tapas cogiendo inspiración italiana, pero con productos de temporada y de proximidad. Es de los pocos locales de Barcelona que puede presumir de tener un huerto urbano de donde sacan algunas de las verduras y especias. ¡Genial!
Su carta es muy variada y llena de platos dignos de un restaurante puntero que nunca dejan de mejorar. Esto lo hacen sin renunciar a su idea de que todo el mundo pueda comer sus creaciones; por eso el 90% de su carta no contiene gluten, y los demás alérgenos están cuidadosamente marcados.
Si quieres saber realmente si My Fucking Restaurant posee una matrícula de honor en el arte culinario, tu asignatura pendiente se basa en probar el menú degustación por un total de 40€. Nos trajeron un suculento caldo de bienvenida que evocaba el sabor tradicional de la cocina casera preparada por una nonna. También nos deleitaron con un sabroso pan con tomate y una berenjena china braseada con beurre blanc y sesamo.
De allí probamos el boniato con chutney de cilantro y praliné de ajo, junto con la mollete de kimchi y scamorza ahumada. También degustamos el enoki en agua de azafrán y el shiso en tempura con ajì de Mandarina y miel.
Ahora llegamos a nuestros dos platos favoritos. En primer lugar, el risotto de maíz en texturas, que se presenta con palomitas para darle un toque distintivo y único. El otro plato es el espagueti al pomodoro, que aparentemente parece pasta, pero en realidad está elaborado a base de nabo. Nos sorprendió gratamente esta idea, ¡fue un acierto total!
Para concluir, probamos el buñuelo de Parmesano y calabaza, que tenía un sabor delicado y poco dulce, perfecto para aquellos que prefieren evitar el exceso de azúcar.
Disfrutamos de esta agradable comida con música de fondo en un estilo ambiental-chill out, lo que creó una atmósfera de calma y serenidad. Acompañamos nuestra experiencia con una botella de vino blanco «Herència Altés – La Musaranya», traído directamente de la bodega.
Es importante destacar la sala privada que tienen junto a la cocina; es un verdadero lujo poder observar a los cocineros mientras preparan los platos. Síguelos en Instagram para ver el día a día en su cocina y sus preciosas creaciones.
Datos de interés:
Qué: My Fucking Restaurant.
Cuándo: J – L: 19:00 – 23:00h | S – D: 13:00 – 16:00h
Dónde: Carrer Nou de la Rambla, 35, Barcelona
Precio: aprox. 20/35€ por persona.
Contacto: 936 39 78 27 | Mail