La sabiduría oriental en Poble Sec cumple 10 años
Se cree conocer mucho de la cocina asiática, o mejor dicho del sucedáneo que la mayoría conocemos, pero la realidad es que sabemos poco de ella, al menos de la de verdad. De primerísima mano los propietarios de Casa Xica, Raquel y Marc, comparten generosamente todo lo vivido, aprendido, cocinado y degustado en su periplo vital por aquellas lejanías. En el Poble Sec se embarcaron en esta aventura que para ellos es su forma de vida y lo cierto es que, más allá de su destreza y talento en la cocina, hacen de su restaurante un lugar realmente familiar y acogedor.

Fideos de soja verde, gamba roja y tobiko.
Díez años después, han querido hacer un homenaje a su primera década llenando su carta de los greatest hits de la década. También han creado un menú degustación que viaja por los mejores (de los mejores) platos que te recomendamos si quieres la experiencia al completo.
Casa Xica es un sitio acogedor y muy romántico. Foto: Alex Froloff.
Lo primero que nos hacen saber al llegar es el respeto y la sensibilidad que en Casa Xica profesan al vino. Apuestan exclusivamente por vinos naturales (libres en gran parte de componentes químicos, sin excesiva intervención tecnológica y de trato justo con los agricultores). Claramente, el perfil de las referencias con las que trabajan irá en perfecta consonancia con la originalidad y la chispa de su propuesta gastronómica.
Y sin más dilación, empezamos con el menú: Tartar de calamar con ajo blanco de coco y lima. Es un plato que crearon el 2018 y es una gran introducción a su cocina. Dicen que substituir una parte del agua y el aceite del clásico ajo blanco por leche de coco fue una revelación para ellos; realmente, esto y el calamar macerado en soja le dan una identidad única al plato. Tiene tantos sabores interesantes que cada cucharada es un mundo.
Tartar de calamar con ajo blanco de coco y lima.
Acto seguido pasamos al Sashimi de lomo de atún y salsa ponzu. Como nos dijo Joan, la tercera pata del Casa Xica, «esto es solo producto», y no le falta razón. Sin un atún que se deshiciera a la boca, este plato no valdría nada. Pero lo vale todo. Es un privilegio poder comer un pescado de tanta calidad.
Sashimi de lomo de atún y salsa ponzu.
Lo siguiente fue uno de sus platos más celebrados: Gyozas de gamba, foie de bacalao y espinacas. No has probado nunca unos dumplings como estos: son una locura. Destaca especialmente la frescura y el punto terso de la gamba y la masa crujiente y ligera. Todo bien hilado con el foie de bacalao. Lo sirven sin soja u otras salsas porque, como te puedes imaginar, no les falta sabor.
Gyozas de gamba, foie de bacalao y espinacas.
Raquel y Marc dicen que los Fideos de soja verde, gamba roja y tobiko no es que sean un clásico, es que son intocables. Es claramente su buque insignia, y cuando lo pruebas lo entiendes perfectamente. Han estado en su carta casi de forma ininterrumpida desde el 2016, y es que Joan nos dijo que cada vez que lo quitaban, había alguien que se enfadaba. Entre sus ingredientes hay leche de coco, brandi, mantequilla, hueva de mujol y de tobiko y fideos de soja. Esto te lo decimos para que entiendas que son untuosos hasta límites insospechados. Te llenan la boca de felicidad. Hay la receta de estos fideos en su libro, pero no nos atrevemos a hacerla porque seguro que los estropearíamos de alguna forma.
Cochinillo confitado y crujiente estilo Hong kong.
El último plato principal que nos trajeron fue otro por el que se han hecho respetar en la escena gastronómica barcelonesa. El Cochinillo confitado y crujiente estilo Hong kong. Fue una de sus primeras creaciones en un ya lejano 2014. Está cocinado con una técnica asiática pensada para grandes piezas de carne. El cerdo queda tan tierno que en cada bocado se funde con el brioche que le sirve de colchón. Y lo que lo hace aún más interesante es el contraste con el crujiente de la piel (lo acaban en la plancha para conseguirlo). Lo acompañan de una salsa de ostras y cebolla tierna china y Joan nos aconsejó comerlo con la mano… suponemos que es para poder chuparte los dedos después.
Pastelito de chocolate negro con aceite de sésamo y chili, galleta de almendra y frutos secos a la cantonesa.
Acabamos el festín con un postre de contrastes en su textura: Pastelito de chocolate negro con aceite de sésamo y chili, galleta de almendra y frutos secos a la cantonesa. Es perfecto para aterrizar otra vez en Barcelona con sabores que resumen muy bien la experiencia Casa Xica.
Raquel y Marc son dos mentes gastronómicas inquietas: su carta está en constante evolución. Por ello, es probable que, cuando vayas, algunos de los platos que te hemos presentado hayan sido substituidos por otros que a buen seguro mantendrán el nivel. Si quieres estar atento a lo que van haciendo en Casa Xica, te aconsejamos que visites su perfil de Instagram.
En resumen, Casa Xica propone una revisión de la cocina china tradicional hecha desde el respeto, pero con todo el descaro y atrevimiento que caracterizan a Raquel y Marc para conseguir así la fusión perfecta entre la cocina asiática y la local. Como ellos dicen, «Cuinem a fuck lent». Lo dicho: respeto y descaro.
Datos de interés:
Qué: Casa Xica
Dónde: Carrer de la França Xica, 20
Cuándo: Ma y Mi: cenas | Ju a Sá: comidas y cenas.
Precio: Carta 45 € por persona (aprox.) | Menú degustación: 60 € | Maridaje: 25 €.